Así de categóricos se están mostrando muchos de los pequeñajos a lo largo de estas semanas, no es fácil asumir el cambio de roles y debemos armarnos de mucha paciencia y comprensión.
No se trata de reconvertirse en profes ni de seguir el mismo horario de clase, se pretende que no pierdan del todo su rutina , en suma que aprendan y estén entretenidos. Cada niño/a es un mundo, no existen recetas mágicas ni universales, a continuación os detallo una serie de estrategias que suelen dar buenos resultados con un poquito de constancia.
Espero que os resulten útiles.
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